Junto con la versión limitable para los poseedores del A2 y la variante R, nos topamos con esta R Rally mejor equipada para la práctica del off-road.

Externamente se distingue por su llamativo color naranja y púrpura mate y un kit decorativo exclusivo. El asiento corrido, los reposapiés de enduro o el asiento a una vertiginosa altura de 910 mm, hablan por sí solos del propósito de su existencia.

La cúpula del fabricante austriaco es ligeramente diferente al modelo R, y adopta carenados y aleta terminados en fibra de carbono. Los neumáticos con cámara tiene dibujo off-road y van acopladas a unas llantas más resistentes para el uso por terrenos especialmente abruptos.

Para el apartado de suspensiones se ha optado por lo mejor, con una horquilla WP XPLOR PRO 7548 con tecnología Cone Valve, un empuje cónico que garantiza en palabras de KTM “la extrema comodidad, amortiguación y resistencia al derrape”. Los ajustes se pueden realizar individualmente desde el exterior.

El amortiguador trasero es un WP XPLOR PRO 6746, también totalmente ajustable, que utiliza componentes con bajo coeficiente de fricción para incrementar la eficiencia y crear una conducción menos exigente para todo tipo de pilotaje. Unas suspensiones que incrementan el recorrido en 30 mm (270 mm), lo que responde a la gran altura del asiento y al pequeño incremento de la distancia entre ejes.

Mecánicamente la R Rally toma la mecánica LC8c de la R y le agrega el Quickshifter + y un escape Akrapovic más ligero que el convencional. Pero de igual modo desarrolla 95 CV y 88 Nm de par motor.

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