El probable incremento de cilindrada del motor LC8c podría venir aparejado de otras mejoras técnicas y por una revisión total de la parte ciclo. El depósito de combustible parece situado más bajo, para disminuir el centro de gravedad. Un movimiento que ya anticipó la Adventure 790.
La electrónica podría ser la que incluya más novedades, comenzando por un ABS de última generación.
KTM sigue una política diferente al resto de fabricantes con su gama de modelos. En lugar de lanzar modelos nuevos radicalmente diferentes, lo que hace es seguir una evolución progresiva de los existentes. De este modo van incrementando su cilindrada, incorporando más equipamiento electrónico, y progresando en un lenguaje estético muy continuista.
En el Salón EICMA de Milán podríamos disponer de la confirmación oficial.
Fuente: rideapart.com