"La mayoría de los crímenes en esta ciudad, inclusive los asesinatos selectivos, son perpetrados desde motocicletas. Por lo tanto, hemos decidido prohibir el uso de motocicletas en la ciudad de Kabul y sus barrios", señaló el portavoz del ministerio del Interior afgano, Tariq Arian.
La polémica decisión deja a los afganos sin uno de los más económicos y populares medios de locomoción. Los grandes atascos de la capital lleva a la mayoría de ciudadanos a desplazarse en scooter.
La medida no afecta a todos por igual, y los repartidores podrán seguir utilizando las motos como medio de trabajo, algo especialmente necesario en un momento en el que la pandemia por COVID-19 también afecta a los afganos.
Fuente: infobae