El precio pagado es un récord mundial para una Pierce Arrow, lo que indica que si el modelo está bien conservado los coleccionistas hacen su voto de presencia.
Los modelos de Pierce se caracterizaban por unos precios demasiado altos para la época. Su alta calidad no consiguió atraer más que a 500 clientes entre los años 1909 y 1914. Los actuales propietarios de tan escaso número de unidades no suelen llevarlos a subasta, por lo que, cuando finalmente se producen, se logran precios muy elevados.
La Arrow muestra una completamente inusual disposición de los cilindros lineal, con cuatro cilindros refrigerados por aire que transfieren la potencia a la rueda posterior mediante un cardan. En el lado opuesto nos encontramos con pedales y una cadena como si de un bulgar ciclomotor se tratara.
La disposición de los cilindros es muestra de que la Pierce Arrow Motor fue principalmente un fabricante de automóviles con base en Buffalo (Nueva York). Entre 1901 y 1938 era conocida por sus caros coches de lujo, pero también construyeron coches de bomberos, motocicletas y bicicletas.
Fuente: New Atlas