El control se reforzará con la instalación de dos radares, una mayor presencia de la Guardia Civil y controles frecuentes de alcohol y drogas. Su objetivo será evitar que se reproduzcan las carreras ilegales de motos con delincuentes grabándose a 140 km/h, o que este verano han provocado un incendio que calcinó 1.096 hectáreas tras la salida de la carretera de una motocicleta.
Según las declaraciones realizadas para la cadena SER y recogidas por Europa Press: "Hemos tomado buena nota de lo que allí ocurre y se implementará en un espacio de tiempo corto. Es una zona bonita para la moto, pero tienen que tenerlo en cuenta, porque ponen en peligro su vida y la del resto de los ciudadanos. Además, han generado un incendio a veces con consecuencias notable".
Fuente: madriddiario.es