En especial circulan por 500 metros del carril bus-VAO de la A-6, que está equipado con una red de cámaras dotadas con Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS). Una solución basada en la visión artificial y el big data, que permite identificar en tiempo real el tipo de vehículo que circula por el carril y su número de ocupantes. La solución es similar al proyecto californiano BeCamGreen.
Los vehículos autónomos que circulan por dichos carriles son capaces de alcanzar velocidades superiores a los 80 km/h y aunque aún necesitan supervisión humana por parte de un conductor y un supervisor, ya muestran el nivel de madurez de la tecnología de comunicación con la vía.
Estos equipos facilitan la comunicación entre el vehículo autónomo y el centro de control de tráfico, por lo que es dicho centro el que informa a los vehículos de todo aquello que no pueden “ver” por si mismos.
La plataforma de control de tráfico se denomina Horus, y permite gestionar el envío de información sobre la situación de tráfico, el clima, obras, etc. La tecnología de Indra servirá para gestionar la movilidad del futuro no solo de España, sino también de ciudades como Lisboa o París.
Fuente