El Director General de Tráfico (DGT), Pere Navarro, estudia la posible equiparación de España con otros países del entorno que, como Francia, han reducido la velocidad máxima de las carreteras secundarias hasta los 80 km/h. El resultado es que en Francia bajaron las cifras de muertes en un 8,4% en mayo, en junio un 9,3% y en julio un 5,5%.
Navarro lo cita ahora como “ejemplo de políticas de seguridad vial”, por lo que la concienciación, más radares, y reducir los límites genéricos de las vías secundarias, son las principales medidas por las que apuesta la DGT para devolver a la senda bajista las cifras de fallecidos en carretera.
La nueva visión de Tráfico ha sido anunciada durante la presentación del balance oficial de la DGT de este verano, en donde se ha presentado unas estadísticas que muestran la tendencia ascendente en cuanto al número de víctimas mortales y de accidentes.
Un total de 259 personas fallecieron durante los meses de julio y agosto, un 15% más que en el mismo periodo de hace un año. Y el 76% de los fallecidos se produjeron en las carreteras convencionales, las vías en las que hay que centrar más los esfuerzos.
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