En 2018 se registraron 249 muertes en los 69.938 accidentes viales laborales, aquellos que ocurren en el trayecto de la casa al trabajo y viceversa, o durante una “misión”, que con frecuencia se relaciona al transporte de mercancías.

La siniestralidad de las carreteras representa más del 10% de todos los accidentes laborales, unos 600.000 en 2018. La mortalidad en este tipo de accidentes de tráfico sucede especialmente los días laborables de 7:00 h a 9:00 h y, en especial, los martes a partir de las 8:00 h.

El informe del 2018 muestra un preocupante incremento, con un ascenso del 23% comparado con 2017, siendo las mujeres jóvenes (entre 16 y 29 años) que utilizan el coche y tienen un contrato temporal en una compañía de más de 250 empleados, las que más sufren este tipo de accidentes fatales.

Dos tercios de los accidentes ocurren por la necesidad de llegar puntual al trabajo, por ello la hora más fatídica son las 8:00 h de la mañana. Del mismo modo influye el estrés causado por la situación laboral. Cuanto mayor estabilidad laboral menos riesgo de padecer un accidente. Eso explica que los que tienen contratos temporales, sean los más propensos a sufrir accidentes.

Junto al estrés, actúan otros factores también importantes como el cansancio y la distracción: más de la mitad (55%) usa coche propio para ir y regresar y tienen un 54% de accidentes; los que van en moto, sin embargo, representan el 4%, pero ocupan el 23% de los siniestros; y en tercer lugar, los peatones, que son el 18% y sufren el 13% de los problemas viales.

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