La investigación se inició cuando los agentes tuvieron conocimiento de las sustracciones de motocicletas de gran cilindrada. Las primeras pesquisas llevaron a los agentes hasta un grupo de personas, miembros de una misma familia y residentes en el distrito Norte de la ciudad de Granada.

Modus operandi

Los delincuentes cometían los robos siempre de la misma manera.  Seleccionaban previamente las motocicletas que iban a sustraer. Después cometían los asaltos por la noche y en garajes del mismo barrio donde residían.

Posteriormente trasladaban las motos robadas hasta un garaje donde las desguazaban y las montaban con distintas piezas y matrículas que habían adquirido con anterioridad a través de la Red.

También compraban la documentación de otras motocicletas siniestradas de desguaces de España para relacionarlas con las motos sustraídas. Una vez modificadas y falsificadas, las vendían a través de Internet.

La operación se ha saldado con la detención de tres miembros de la misma familia y la recuperación de cuatro motocicletas de gran cilindrada, valoradas aproximadamente en 30.000 euros.

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