Hace unos días, la DGT anunció una nueva campaña informativa para informar a los propietarios de vehículos con más de diez años de anitgüedad del peligro que podían sufrir en caso de accidente. La idea levantó todo tipo de opiniones, pero nadie esperaba que solo unos días después de empezar generase tanta polémica.

Lo que ha sucedido es que Tráfico, en base a unos archivos que parecen estar bastante desactualizados, está enviando cartas a propietarios que dieron de baja el coche en cuestión hace décadas e, incluso, a titulares que ya han fallecido.

"Llevamos dos días en los que el teléfono no para de sonar, hemos recibido decenas de llamadas de gente que no sabe que está pasando, ya que han recibido la información del primer coche que tuvieron hace 30 años, o de familiares a los que les llega una carta advirtiéndoles de que el coche de su abuelo, ya fallecido, no tiene seguro", explican desde la Red Operativa de Desguaces Españoles,

Esta empresa, que se dedica a dar de baja y desguazar vehículos remite todas las llamadas al teléfono de información de la DGT, el 060, "pero parece ser que desde allí les remiten a las Jefaturas de Tráfico", apuntan.

La Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) se ha unido, junto con el RACE y Bosch, a la campaña informativa de la DGT, indicando que el riesgo de morir en accidente de tráfico en un coche viejo duplica las posibilidades de fallecer en un siniestro a bordo de un vehículo nuevo, según se desprende del informe "Antigüedad del vehículon y accidentalidad en España".

El estudio indica que, en autovía, en accidentes de coches de menos de cuatro años se produce una muerte por cada 74 siniestros, mientras que para los coches de más de quince años, la proporción es de un fallecimiento por cada 36 accidentes. Mientras en carreteras convencionales, se contabiliza un muerto por cada 41 accidentes en los coches nuevos, en tanto que en los más antiguos dicha proporción se sitúa en un fallecimiento por cada 19 accidentes.

El responsable de Prensa de Automoción de Bosch, Lorenzo Jiménez, repasó la eficiencia de los sistemas de seguridad activa y pasiva de los vehículos, y su contribución potencial a reducir el número de accidentes y víctimas con su presencia en todos los vehículos.

De su lado, el director de Comunicación de ANFAC, David Barrientos, subrayó que gracias a los planes PIVE y PIMA Aire 400.000 conductores han podido cambiar su vehículo antiguo por otro más seguro, y explicó que la media de edad de los vehículos retirados a través de estos programas se sitúa en torno a 16 ó 17 años.