En su intervención Seguí afirma que España ha logrado con ocho años de antelación, dos de los 13 objetivos marcados en el Plan Estratégico de Seguridad Vial 2001-2020: reducir un 25% el número de conductores jóvenes (18-24 años) fallecidos y heridos graves en fin de semana, y en segundo lugar, reducir en un 20% los fallecidos y  heridos graves entre los usuarios de motocicletas.

De hecho Seguí ha colocado a España en la séptima posición mundial entre los países con tasas más bajas de fallecidos por millón de habitantes, solo por detrás de Malta, Reino Unido, Suecia, Dinamarca, Países Bajos, e Irlanda.

Por contra, hay tres indicadores para los cuales las cifras de 2012 muestran un retroceso. Uno es el referido a cero fallecidos sin sistema de retención infantil (en 2012, 15 menores fallecidos iban sin ningún sistema de retención), otro es el del 10% menos de conductores fallecidos mayores de 64 años y el último el de conseguir un millón más de ciclistas sin que aumente su tasa de mortalidad

MEJORA DE LOS SISTEMAS DE INFORMACIÓN

A la hora de contabilizar los heridos graves y heridos leves, se recurría antes del 2010 al recurso o no del ingreso hospitalario. Estos datos mostraban una relación de 1:5:55, es decir que por cada fallecido de tráfico a 30 días (tras el siniestro) se producía una media de 5 hospitalizados y 55 heridos.

Desde 2011, se han  mejorado los sistemas de información y los datos policiales y se han contado con otras fuentes hospitalarias, de tal modo que sea constatado que por cada fallecido, hay 12 personas hospitalizadas y 276 heridos atendidos en urgencias.

Además se ha comprobado que hay 300 municipios que no informan de los accidentes desde 2008, y que otros informan de forma deficiente.

Con estas modificaciones la DGT espera poder presentar unos datos del 2013 mucho más exactos. Mientras llega el momento de tener todos los datos disponibles, Seguí confirma que el año pasado se produjeron 994 accidentes mortales, en los que fallecieron 1.128 personas y 5.206 resultaron heridas graves. Es decir se produjeron 173 fallecidos menos que en 2012, con un descenso del 13%, y del 16% para el caso de los heridos graves.

DESCENSO DEL NÚMERO DE MULTAS

Seguí también ha querido despejar dudas en relación a su política de control de la velocidad, en el que se han reparado 400 de los 750 radares existentes para asegurar su funcionamiento y se han reubicado los radares móviles para el control de las carreteras convencionales.

María Seguí no ha entrado a cuantificado el importe de la recaudación por multas, aunque en su comparecencia en el Congreso en octubre de 2012 pasado para explicar los Presupuestos de su departamento del año fijó en 384 millones de euros lo esperado para el ejercicio 2013.

Lo que sí ha desvelado es que la DGT tramitó 4 millones de multas, la mitad de ellas por velocidad, una cifra que es un 12,5% inferior que la del año anterior, a pesar de lo cual la recaudación no ha mermado debido a una mayor agilidad en el procedimiento de pago.