Asociación Mutua Motera

      
 
 
Detección de conductores ebrios por láser
  9 de Junio de 2014
  Detección de conductores ebrios por láser

Hasta el momento la única forma de detectar a un conductor ebrio es deteniendo el vehículo y practicando un lento proceso de test alcohólicos. Eso podría cambiar con el desarrollo de un nuevo dispositivo láser que puede detectar la presencia de alcohol en el interior del vehículo en movimiento.

Los detectores láser para el alcohol pronto podrían ser el equivalente a los radares para la detección del exceso de velocidad. Investigadores polacos de la Universidad Militar de Tecnología de Varsovia han demostrado cómo los rayos de alta intensidad de la luz se pueden utilizar para detectar la presencia de alcohol - incluso el alcohol espirado por sus ocupantes – en un vehículo en movimiento.

Los científicos utilizaron un tipo de detección stand-off, a distancia. Una técnica que se utiliza normalmente para la detección de sustancias peligrosas, explosivos u otros elementos peligrosos, sin poner en peligro la vida de los policías.

En este caso particular, el láser se dirige a través de las ventanas del vehículo, sobre un espejo situado al otro lado de la carretera, donde es reflejado de vuelta a través de las ventanas a un fotodetector. Dentro del coche, el vapor de alcohol emitido al aire por la respiración del conductor, presenta una concentración similar al exhalado en un test de alcoholemia.

Mediante el análisis  espectroscópico de la luz reflejada, es posible detectar la cantidad de alcohol y su concentración en el aire del interior del vehículo. A partir de ese dato, el sistema fotografía la matrícula del vehículo y lanza una advertencia a la policía que deberá detener el vehículo para comprobar la fuente de dicho alcohol (el conductor, los acompañantes, una botella dentro del vehículo…). 

El sistema no puede emitir una sanción inmediata porque no es posible demostrar que dicha presencia de alcohol en el aire corresponde a la respiración del conductor del vehículo. Pero si resulta útil con el fin de realizar los test de alcoholemia a un número mucho mayor de vehículos, sin detener el tráfico ni molestar a los conductores que no han bebido.

Los investigadores están en la última fase del proyecto, disminuyendo el tamaño, peso y precio del detector, y convirtiéndolo en una herramienta fácil de usar para los agentes de tráfico.

Fuente: Gizmag