Han sido cuatro años de espera interminable, pero finalmente KTM marca un hito en su historia al lanzarse a la producción de motocicletas eléctricas. KTM sigue así los pasos de BMW con su scooter C-Evolution, aunque en su caso la apuesta es por los vehículos off-road, la enduro E-XC y la de motocross E-SX.

El motor eléctrico desarrolla 21,5 CV Y 42 Nm de par, alejado de las cifras del prototipo inicial de 30 CV, pero aun así una potencia muy respetable dada la alta cifra de par motor disponible desde cero revoluciones por minuto.

Con un chasis híbrido que combina acero en la parte superior y aluminio en la inferior, y un subchásis fabricado a base de poliamidas reforzadas con fibra,  el peso del conjunto queda fijado en 110 kg para la versión enduro y 106 kg para la de motocross. Las baterías de iones de litio de 2,6 kWh de capacidad, dan autonomía suficiente para circular durante una hora aproximadamente. La baterías se pueden recargar al 80% en 50 minutos o al 100% en 80.

El delgado asiento se encuentra a 900 mm de altura y su diseño permite una gran libertad de acción al piloto. En el apartado de suspensiones KTM recurre a una horquilla WP y el monoamortiguador PDS de 250 mm. Las llantas son Giant y los neumáticos MAXXIS.

El Freeride E-XC parte de los 11.398 euros y el Freeride E-SX de los 11.098 euros.