Hace ya mucho tiempo que viene funcionando en toda España -como país reconocido mundialmente como apasionado del motociclismo- escuelas que desarrollan su actividad en circuitos y que enseñan a sus alum nos o participantes a explorar las posibilidades dinámicas de su montura, pero muchos echaban en falta cursos de nivel muy básico donde se enseñen las trazadas más sencillas y detalles tan útiles como mover la moto en parado, como frenar antes de afrontar una curva. Y todo ello en un entorno donde la mayoría de nosotros nos movemos habitualmente. Es decir, la carretera abierta.

Hasta este momento, en España legalmente sólo se podía cerrar las carreteras por eventos deportivos o políticos, pero la AMM (Asociación Mutua Motera) consiguió por primera vez que un tramo de carretera abierta -el famoso puerto de Canencia, al lado del pueblo serrano madrileño de Miraflores - se cerrase para poder impartir un curso del que muchos motoristas disfrutaron de lo lindo . Para escribir este reportaje enviamos a una persona que podemos considerar el objetivo perfecto de este tipo de iniciativas para que, de ese modo, pudiera transmitir toda la influencia que un evento así pueda tener: con experiencia en moto, pero que no había disfrutado de sus anteriores incursiones en cursillos de circuito y que además no terminaba de encontrarse cómoda en ciertas situaciones ni ciertos trazados de carretera. Además, es mujer, por lo que representa a un colectivo está creciendo como la espuma en los últimos años y que actualmente es uno de los objetivos prioritarios tanto de fabricantes como de instituciones.

Esperemos que disfrutes de esta narración y que si estabas pensando en buscar y participar en alguna iniciativa de este tipo, te animes cuanto antes.

D.G.N / Nora Cámara
David G. de Navarrete, Autocity
22 de junio de 2011

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