Los más perjudicados han sido los motociclistas, con un preocupante incremento de 60 víctimas respecto a 2014. Lo que en palabras del presidente de la Asociación Mutua Motera (AMM), Juan Manuel Reyes, supone la “materialización del fracaso de la política” de la directora general de Tráfico, María Seguí. Así como el fracaso de la “inexistente” política por parte del Gobierno en la última legislatura.
Estas muertes son fruto de la clausura del grupo de trabajo (GT-52) que reunía a la Administración y los motociclistas afirma Juan Manuel Reyes para Europa Press. "Ahora se le ha disparado la siniestralidad y lo vuelve a convocar – el próximo 25 de enero -", a pesar de que desde la AMM “se le advirtió” sobre el riesgo que suponía el repunte de movilidad de motos por la mejora de la situación económica.
Al repunte de movilidad hay que sumar el mal estado del firme, un factor al que es especialmente sensible el sector de la motocicleta. Y aún más, "la DGT reconoce que el 18 por ciento de los motoristas fallecidos son por golpes contra el guardarrail, sabiendo esto la administración ha paralizado la inversión en sistemas de protección al motorista. No se habrían evitado todas las muertas, pero sí un 18 por ciento".
La Plataforma Motera para la Seguridad Vial considera las cifras del 2015 como “un verdadero desastre”. A su juicio, es imperante volver al grupo de trabajo GT-52, y hay que incrementar la contundencia, formación, educación, implicación y co-responsabilidad.
El presidente de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo, contradice el informe presentado por el Ministerio del Interior, indicando que sus cálculos detectan “un repunte de la siniestralidad en las carreteras”, por lo que “ponen en cuarentena” los datos facilitados por el Gobierno.
Lo que ofrece el Ejecutivo en su Informe de Seguridad Vial 2015 es un “baile de datos”, como lo contradictorio que resulta que los accidentes mortales hayan aumentado en un 3%, y sin embargo, las muertes totales desciendan un 1%. O que se comparen las cifras españolas con las francesas, cuando este país no aporta cifras hasta pasados 30 días.
El RACC también valora las cifras como un estancamiento, que desde 2013 mantiene las víctimas mortales en el entorno de las 1.130 al año. Además hace notar el fuerte contraste entre comunidades autónomas que en algunos casos consiguen reducir las cifras de víctimas mortales en un 40% a la par que en otras se incrementan en un 100%.
Finalmente desde `Stop Accidentes´ aseguran que no se puede bajar la guardia y hay que continuar buscando un “Pacto de Estado” para que la Seguridad Vial sea una prioridad política y una asignatura en los colegios.
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