Asociación Mutua Motera

      
 
 
Una especie invasora amenaza al scooter eléctrico español
  25 de Julio de 2017
  Una especie invasora amenaza al scooter eléctrico español

En los últimos años se ha producido un cambio de mentalidad en nuestro país en relación a los vehículos eléctricos. Las motos eléctricas ya no son una simple idea de futuro, sino que hay numerosas empresas emergentes (Silence, Torrot, Volta…) e históricas (Bultaco, Rieju, GAS GAS) que apuestan por ellas hoy.

El problema de la implantación de una nueva tecnología es que depende mucho de dónde aparezca. No es lo mismo que lo haga en un país como los EE UU o China con cientos o miles de millones de potenciales clientes, que lo haga en un país como España. Si a ello añadimos que España es un país de tradiciones, con cierta resistencia al cambio, nos encontramos que el despegar de dichas empresas emergentes está siendo más lento de lo esperado.

Mientras, en otras partes del mundo la moto eléctrica arrasa. Estamos hablando de China que con sus 1.300 y pico millones de habitantes (el pico ya supera a toda la población de España), se venden 20 millones de motos eléctricas al año, frente a las 1.422 motos matriculadas en 2017 en España. Una tendencia que sigue al alza en China, en España y en el mundo, espoleada por los bajada de precio de los modelos.

En dicho caldo de cultivo aparecen empresas también emergentes como Niu, de Token Hu (35 años), que se han abierto hueco muy rápidamente en el mercado de scooter eléctricos de China. Tan rápidamente que ya piensan en su expansión internacional por países europeos como Alemania, Austria, Bélgica, Francia e Italia. El distribuidor austriaco KSR Group acaba de anunciar su intención de iniciar la distribución en dichos mercados. Solo en su primer año espera colocar 10.000 unidades del modelo Niu N1S.

Las motos eléctricas tienen una cuota próxima al 2% de las ventas, una cuota que crece a gran ritmo en Europa. Las empresas españolas pueden aprovecharse de esos números, pero para ello necesitarán de la colaboración de los ciudadanos y los organismos públicos. De lo contrario la historia se repetirá una vez más y tendremos que acercarnos a los concesionarios de vehículos extranjeros para adquirir una unidad de scooter o moto eléctrica.