El modelo Cake Kalk INK SL es una de las múltiples transformaciones de la plataforma con más posibilidades del mercado. Más de mil configuraciones posibles le ha valido un gran número de reconocimientos y premios, pero falta ver cuál es la respuesta del mercado ante unos modelos que parecen salidos de un juego de LEGO.
El segmento de las motos eléctricas está relativamente despoblado, la importante ausencia de competencia permite realizar experimentos como el modelo de Cake. Un vehículo destinado al disfrute al aire libre, con un peso de tan solo 69 kg, gran manejabilidad y capacidades todoterreno, con 11 kW (14,8 CV) de potencia y cero emisiones contaminantes
El Cake Kalk INK SL se lanza con una configuración y un precio más accesible que sus hermanas de gama las Kalk & y Kalk OR, y se une al más asequible Cake Ösa como modelo de venta en Europa y los Estados Unidos. Aunque en esta ocasión hablamos de una motocicleta de off-road con ruedas de 19”, velocidad máxima de 100 km/h y autonomía entre los 35 y los 86 km, según el tipo de conducción y la batería por la que optemos.
Y es que tanto la batería como la trasmisión y el chasis de aluminio, son los mismos que comparte con todos los demás miembros de la familia. Solo se distingue por la incorporación de una suspensión esecífica de motocross con largo recorrido, guardabarros negro y carrocería de policarbonato.