La carrocería ha sido completamente rediseñada mostrando una imagen más ligera y estilizada. Gracias a la disposición de los radiadores laterales, que ha permitido reducir la anchura del semicarenado frontal, su aspecto se asemeja en cierto modo a la BMW F800, un conjunto más trail y menos asfáltico.

Ese incremento de la polivalencia y de las prestaciones se ve refrendado en la mecánica, que sobre la misma base del V4 a 90º (DOHC), con distribución variable VTEC, consigue ofrecer más par a bajo y medio régimen, a la vez que aumenta su potencia máxima hasta los 106 cv (78 Kw) @ 10.250 rpm (antes 101 CV).

El bastidor doble viga de aluminio incorpora un subchasis revisado, más ligero, y un nuevo basculante de aluminio. Las suspensiones son de nueva factura y cuentan además con mayor recorrido: 25mm en la horquilla delantera y 28mm en el amortiguador trasero, en búsqueda de un mayor confort y acceso a caminos en peores condiciones del asfalto. 

En cuanto al equipo de frenos, el tren delantero confía ahora en unas pinzas de 4 pistones de anclaje radial que actúan sobre dos discos de 310mm. Como no podía ser de otro modo, el modelo cuenta con sistema ABS de serie.

Donde más cambios apreciamos es en el nivel de equipamiento, incorporando el sistema de control de par (Honda Selectable Torque Control, HSTC) heredado de la Crosstourer, que permite incrementar el control al reducir el par motor de una forma suave en el preciso instante que se detecta una inminente pérdida de tracción en la rueda trasera.

El nuevo asiento partido, admite ahora el ajuste en dos posiciones de altura, los puños térmicos son de 5 niveles, los intermitentes autocancelables, anclajes directos para las maletas laterales, pantalla regulable, y nuevo sistema de iluminación LED.

Honda Motor Europe no ha informado aún de la próxima fecha de comercialización de la VFR800X Crossrunner 2015, o del precio de salida para el mercado español.