Así lo ha comunicado la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) en un comunicado, en la que se recalca que “incluso se ha llegado a enviar a los usuarios particulares cartas en las que se les indica la necesidad de cambiar los automóviles de más de 7 años (con la que está cayendo) por los riesgos que conlleva conducir este tipo de vehículos”.

Asextra también denuncia que mientras que los jefes provinciales de Tráfico utilizan vehículos que suelen ser “prácticamente nuevos”, los de uso general “cuentan con una antigüedad de entre 15 y 20 años”.

Por todo ello, desde Asexta pretenden destapar la extrema hipocresía, y hacen “un llamamiento a la directora general para que predique con el ejemplo en su propia casa” ya que “se está exigiendo a la ciudadanía lo que los propios vehículos de la DGT no cumplen”.

 

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