La mayor subida se produce entre las de 250 y 500 centímetros cúbicos, cuyas matriculaciones se han visto incrementadas en un 9%, seguidas de las de mayor cilindrada con incrementos del 5%.
La agilidad de las motos en los desplazamientos urbanos y el bajo consumo han decantado a los vigueses por utilizar más la moto. A ello ha contribuido una política que favorece la seguridad vial del colectivo, y que ha ampliado las plazas de aparcamiento para motos.
Vigo ha sido una de las primeras ciudades de España en crear un carril moto para adelantar en los semáforos, como los existentes en las calles Areal y Venezuela. De este modo Vigo es la ciudad que apuesta más fuerte por la moto.
Toda la información en La Voz de Galicia.