El mes de septiembre ha cerrado con un descenso de 95 muertes, frente a los 120 del mismo periodo de 2015. Son 25 víctimas menos, o un descenso del 21% respecto al año anterior. Además en septiembre ha habido un día en el que no se registraron muertes en carreteras interurbanas.
Ana Novella de Stop Accidentes, ha explicado en declaraciones recogidas por Europa Press, que es un dato “positivo porque parece que va frenando el rito de alza de víctimas mortales”, pero invita a “no bajar la guardia por mucho que haya disminuido el número de fallecidos en septiembre”. Ahora se aproximan fechas problemáticas desde el punto de vista de la siniestralidad, por la coincidencia de bastantes puentes y por las fiestas navideñas.
Desde Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo asegura que se trata de una “reducción muy significativa” pero añade que hay que “ser prudentes para ver si se mantiene la tendencia de reducción o se trata de un caso especialmente asilado… debido a efectos meteorológicos (no adversos)”.
Juan Manuel Reyes de la Asociación Mutua Motera (AMM), ha añadido por su parte que aun valorándolos “positivamente” hay que considerar la falta de una dirección política en materia de seguridad vial. De hecho en el cómputo global del año “el número de motociclistas muertos sigue incrementándose”.
No es suficiente con “realizar solamente alguna campaña o plantar España de radares”, hay que reponer los “grupos de trabajo para que entre usuarios y Administración se pueda atajar este problema de forma eficaz y conjunta”. Por ejemplo, hay que aprobar un plan para la instalación de Sistemas de Protección de Motoristas (SPM), “ya que se podría reducir la cifra de fallecidos un 18%”, o incluir en los presupuestos la “inversión para la conservación de carreteras”.
Finalmente ha hablado la vicepresidenta de la Plataforma Motera para la Seguridad Vial (PMSV), María José Alonso, que ha firmado que se debe emprender una “reeducación a toda la ciudadanía porque se ha perdido por completo el miedo y el respeto a la carretera”. Se ha logrado reducir el número de fallecidos en carretera pero no el de siniestros, “hay que hacer un `mea culpa´ desde la Administración al ciudadano”.
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