La nueva Yamaha YZF-R6 2017 hereda el ADN de la R1. Una deportiva de raza que parte de los nuevos aires de familia estrenados en las últimas YZF-R1: tanto por estética, como por la tecnología de su chasis, como por la electrónica de última generación.
Afrontar la renovación de la R6 no es tarea fácil. Estamos hablando de un modelo del que se han vendido 160.000 unidades en Europa y que ha ganado el campeonato World Supersport 3 veces en los últimos 7 años.
Ligera, ágil y rápida, sus versátiles 600 centímetros cúbicos igual valen para el circuito que para circular en el día a día. Ahora todas estas virtudes se ven incrementadas utilizando la tecnología de chasis más modernas derivadas de la YZF-R1, junto con electrónica de primer nviel. La amplia familia de las Supersport de Yamaha están barriendo del mercado a sus competidores (ver la retirada estratégica de Honda con su CBR600RR). Un empuje que ha llevado a las R1, R6, R3 y R-125 ha ser un referente en cada uno de los segmentos.
Siendo un peso medio su desempeño dentro de la gama R es esencial. La YZF-R6 siempre ha despuntado a la vanguardia del diseño supersport extremo. En el modelo de 2017 se incorpora un nuevo diseño de admisión de aire por toma central (inspirado en la M1), con sus dobles faros LED integrados a ambos lados. El resultado es una estética agresiva y desafiante, su frontal de aspecto agresivo nos recuerda inmediatamente al ADN de la serie R de Yamaha.
Pero no solo la estética se verá beneficiada. La aerodinámica es más eficiente (mejora del 8% en la eficiencia aerodinámica). Para lograrlo se ha rediseñado el frontal y la pantalla, pero también los intermitentes LED integrados en los espejos retrovisores.
TECNOLOGÍA PUNTERA DE ÚLTIMA HORNADA
Los fieles de la R6 no tendrán reparos en cambiar a la nueva generación para poder disfrutar del sistema de control de tracción (TCS) avanzado que dispone de 6 niveles de intervención y se ajusta mediante un interruptor en el manillar (incluye la desconexión). El sistema es capaz de compensar el desgaste del neumático trasero garantizando un rendimiento continuo, a la par que actúa de forma inteligente para que el piloto no note nada que distraiga su atención.
También tendremos a nuestra disposición la aceleración controlada por circuito integrado de Yamaha (YCC-T) y la admisión controlada por circuito integrado de Yamaha (YCC-1). O el sistema de cambio rápido (QSS), que facilita el cambio de marcha con gran rapidez.
ADN DE LA R1
Entre los componentes de la YZF-R1 que hereda la R6 se encuentran las horquillas invertidas KYB de 43 mm (antes 41 mm), el amortiguador trasero KYB multiajustables, o el chasis ajustable. Esto permite trasmitir una sensación más estable durante las fases de frenada y en la entrada de las curvas. A ello también contribuye un eje delantero 25 mm más ancho.
Los discos de freno delanteros de 320 mm de diámetro también son R1. Van equipados con pizas de 4 pistones de aluminio para incrementar la potencia de frenada.
El subchasis trasero esta realizado en ligero magnesio, y junto con el nuevo asiento (misma altura que el actual pero con ángulo ascendente hacia la parte trasera) permite al piloto manejar la máquina con mayor agilidad y precisión.
Para el depósito de combustible se ha recurrido al aluminio (-1,2 kg respecto al actual), y cuenta con huecos profundos para las rodillas, lo que facilita las maniobras del usuario independientemente de su estilo de conducción.
Finalmente incorpora un panel de instrumentos con diseño de la YZF-R1. El nuevo tablero de instrumentos incluye un tacómetro de estilo analógico y un velocímetro digital con una pantalla multifunción donde se puede ver el estado del TCS y el ABS.
La Yamaha YZF-R6 2017 se comercializará a partir de abril de 2017 en colores Race Blu y Tech Black.