Se calcula que el 20% del total son talleres ilegales, algo difícil de atajar, especialmente si no existe una figura en la Administración que aglutine todas las denuncias.

En ocasiones los talleres ilegales se encuentran en el propio domicilio, en otras ocasiones incumplen la normativa o no cumplen con todos los trámites administrativos. En estos casos no es cuestión de establecer sanciones, sino de dar tiempo a que los talleres vuelvan a la legalidad.

En el encuentro anual se tomará también en consideración los seguros, la seguridad vial y el acceso a información técnica del fabricante, algo difícil de conseguir para los talleres de menor tamaño (80% del total).

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