En consecuencia, el grueso de los 55 millones de euros de ayudas irán destinadas a sufragar parte de la inversión en la adquisición de vehículos eléctricos puros e híbridos enchufables. Unas ayudas que también irán destinadas a sufragar la instalación de nuevos puntos de recarga.

Las cuantías de las subvenciones podrían ser acumulables con las que ofrecen algunas comunidades autónomas, haciéndolas todavía más atractivas para el ciudadano. En comunidades como Madrid o Castilla y León, las ayudas podrían ser compatibles con las estatales.

El nuevo programa de incentivos estará gestionado por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE).

Fuente