El mes pasado, el gigante japonés hizo la demostración de dos tecnologías experimentales, llamadas V2P y V2M que tienen al smartphone como el centro de un sistema de seguridad destinado a evitar colisiones entre coche y peatón, y entre coche y moto.
En realidad lo que pretenden es reducir la posibilidad de que existan esos atropellos o las colisiones entre coche y moto en entornos como la ciudad, creando una red ad hoc de smartphones conectados a través de una aplicación propietaria, y que establece comunicaciones entre dispositivos en la banda de 5,9 GHz. Esta red permitiría detectar peatones aunque no estén visibles, y avisar tanto al peatón como al conductor mediante diversas señales (acústicas, visuales, y supongo que también mediante vibración). La idea es que el sistema sea una especie de “sentido arácnido”, si me permitís la licencia, tanto para conductores como para personas.
Como vemos, se trata de aprovechar las comunicaciones de corta distancia que son posibles entre smartphones con la aplicación adecuada, de forma que todos dispongamos de un sistema de seguridad preventivo, es decir, que se anticipa por nosotros (ya seamos conductor o peatón) y nos avisa del peligro antes de que sea demasiado tarde. Este sistema tendrá una característica muy peculiar (y opcional seguramente) que es la de informar al conductor si el usuario del móvil está escuchando música, escribiendo texto o hablando por teléfono. En qué cambia el aviso, no lo se. Que puede ser tomado como una invasión de la intimidad de cada uno, es probable.
Sea como sea el sistema, al final lo importante es evitar al máximo las colisiones. Y en el caso de la moto y por ciudad, muy importante. Se evitarían muchas situaciones potencialmente peligrosas, ya sea por el despiste del conductor de coche, por lo “intrépido” del motorista o por la mala baba de cualquiera de ellos. De hecho todos tenemos recuerdo de alguna situación realmente tensa en nuestras ciudades, y al menos un sistema que avise de alguna manera de que entramos en “trayectoria de colisión” con otro vehículo es interesante. Y siempre se puede desconectar, claro.
Proteger al peatón será cada vez más fácil
Sin tener que llegar al extremo de separar completamente peatones de vehículos, cada vez será más sencillo proteger a los primeros frente a un atropello. Las tecnologías como la V2P (Vehicle to pedestrian) y la V2M (Vehicle to motorcycle) dan un paso al frente y se posicionan como auténticos “radares” personales que nos evitarán algunos sustos. No solo Honda investiga en este terreno (aunque sí lleva la delantera a los demás), sino que General Motors está en ello también con su sistema basado en WiFi, y Volvo, cuyo sistema de detección de peatones podemos ver en acción en este vídeo.
En el caso de General Motors, por ejemplo, será necesario que los coches incorporen WiFi (y concretamente un sistema basado en WiFi Direct), y posiblemente tardará más tiempo en estar listo. El caso es que los fabricantes están trabajando intensamente en la loable tarea de proteger a los peatones y a los motoristas. El progreso tecnológico hará el resto.
Circular Seguro