Hace tan solo cuatro meses la Comisión de Fomento del Congreso de los Diputados aprobó una proposición no de ley de Unión Progreso y Democracia (UPyD) para insistir en que fuera "prioritaria" la inversión en mantenimiento de las carreteras. A falta de la aprobación definitiva de los presupuestos, el Gobierno no demuestra estar siguiendo esta línea.
El dato que más preocupa en el sector es la falta de datos sobre las mejoras de la pavimentación de las carreteras españolas. El detalle del programa presupuestario se limita a decir que “se prevé continuar el desarrollo de rehabilitaciones de firmes que se han licitado en 2013”.
Este año, sin embargo, sólo se recuerda por el récord negativo que marcó. El pasado 5 de agosto se cerraban 950 días sin licitaciones en refuerzo de firmes (mejora del pavimento de las carreteras). Los dos contratos que se licitaron ese día hicieron esperar en “un cambio de tendencia” que ahora parece invertirse. “Mantener el mismo nivel significa que se licitarán como mucho siete u ocho obras, alejándonos del mínimo de inversión que estamos pidiendo”, ha explicado a este diario Juan José Potti, presidente de la patronal Asefma.
La inversión anual del Estado en esta partida debería alcanzar, según las indicaciones del Banco Mundial, 1.200 millones anuales para gasto en conservación en pavimento de carreteras. La cifra representaría el 2% del valor patrimonial de la infraestructura, línea roja que marca la institución.
Aumentan las transferencias a autopistas de peaje
Una partida que sí aumenta de forma drástica su gasto es la de compensación a empresas privadas por las carreteras de peaje. Las transferencias a este sector, que alcanzaron los 49.071 millones de euros en 2013, subirán un 36% este año, llegando a 67.430 millones de euros. Solo la de Madrid - Toledo, cuya adjudicación fue bloqueada por el Tribunal Supremo se ha llevado en dos años 7.728 millones de euros.
Los presupuestos de este Ministerio, en su conjunto, se enfrentan a un ínfimo crecimiento del 0,2%. Invertir en nuevos proyectos tampoco entra en los planes del Ministerio de Ana Pastor, ya que la disminución en la partida de Creación de Infraestructuras es del 33%.
Este Ministerio, es, además, el que más recortará en Investigación y Desarrollo, una partida que cada departamento dedica a las actividades de su sector. En el caso de Fomento, el gasto bajará de los 732 hasta los 340 millones de euros, un 54%.