Un informe elaborado por EuroRap y el RACE revela que en las carreteras españolas hay 20 tramos especialmente peligrosos para los motoristas. Son un total de 523 kilómetros de vía.
El estudia evidencia, además, que los tramos negros para motoristas no tienen por qué serlo para los automovilistas. De hecho, en los tramos negros para motoristas se registraron un 17,6% de los accidentes graves o mortales, mientras que el porcentaje de siniestralid en los mismos puntos para vehículos de cuatro ruedas fue del 9,9%.
Los tramos más peligrosos para los motoristas se concentran en vías de alta capacidad donde existe un alto tráfico de motoristas, como la A-66 o la A-67, pero también en tramos de carreteras convencionales, en un entorno de montaña con curvas y cambios de rasante, utilizados especialmente en los fines de semana.
Según el informe, los tramos más peligrosos para los motoristas se localizan en N-325, N-621, N-502, A-66, N-211, N-260a, N-437, A-67, N-435, N-621 y VG-20.
En estos 26 tramos de riesgo, que representan un total de 255.8 kilómetros de carreteras, se producen cada año una media de 58 accidentes mortales y graves, que provocan cada año 13 muertes y 60 heridos graves. Por otro lado, aumentan del 39 por ciento en 2012, al 44,7 por ciento en 2013, el número de tramos con riesgo bajo, lo que también significa una mejora en la seguridad de las carreteras.
SORIA Y PONTEVEDRA CONCENTRAN LOS PUNTOS MÁS PELIGROSOS
El primer tramo de mayor riesgo de toda España es la N-122 en Soria, entre los kilómetros 187,2 y 196,4, que ha registrado nueve accidentes mortales y graves, con resultado de tres fallecidos y ocho heridos graves en los 3 años de estudio, principalmente por salidas de vía. La Intensidad Media de Vehículos es de 3.952.
El segundo tramo negro es la N-120 en Pontevedra, entre los kilómetros 615,5 y 625,9, ha registrado cinco accidentes graves, con resultado de un fallecido y cinco heridos graves. La Intensidad Media de Vehículos es de 2.241.
El programa europeo de evaluación del riesgo en la carretera, EuroRAP, analiza la peligrosidad de las vías teniendo en cuenta la evaluación de los siniestros durante tres años, su gravedad y su relación con las características de la vía.
El resultado se estructura según un 'Índice de Riesgo', definido como el número de accidentes mortales y graves ocurridos en un tramo por cada 1.000 millones de vehículos/kilómetro. Los datos se han distribuido entre autopistas y autovías, carreteras ordinarias y preferentes, que han sido categorizados en tramos de nivel de riesgo según su peligrosidad. En el trabajo se han considerado las vías con una IMD (Intensidad Media Diaria) por encima de los 2000 veh./día.
Al analizar cómo se distribuyen los tramos de la red en función del Índice de Riesgo, se observa que un 92,7 por ciento de los tramos presentan un riesgo bajo o medio-bajo, y un 1,26 por ciento de los tramos presentan un riesgo alto o medio-alto.
En los últimos cinco años se han erradicado nueve de cada diez tramos de riesgo elevado, con una reducción del 89,1 por ciento en el número de kilómetros de carreteras peligrosas, pasando de 2.350 km en 2008 a los 256 kilómetros del presente informe 2013. Por su parte, los kilómetros de máximo riesgo denominados como tramos negros también han tenido una fuerte reducción, pasando de 34 kilómetros en 2012 a los 20 kilómetros actuales, muy lejos de las cifras de 2008 donde se llegaba a los 521 kilómetros denominados como Tramos Negros.
La separación de carriles mediante medianas, los cruces a distinto nivel, una mejor señalización e iluminación, y unos arcenes, zonas de escape y barreras de protección que evitan muchas de las tan temidas salidas de vía, hacen que las autopistas y autovías sean las vías más seguras, ya que se reduce la probabilidad de sufrir un accidente, y si se produce, las consecuencias del mismo serán menores.
El perfil de tramo con nivel de riesgo elevado correspondería a una carretera convencional de calzada única, con intersecciones al mismo nivel y con una IMD por debajo de 10.000 vehículos/día (todos los tramos negros corresponden a carreteras con entre 2.000 y 10.000 vehículos día).