La Sociedad absorbida será la de motocicletas, Suzuki Motor España, que tras el cierre de la planta de ensamblaje de Gijón, solo se dedica a importar y distribuir los modelos de moto de la marca japonesa.
Ahora, Suzuki Motor España traspasará todos sus activos (bienes, derechos y obligaciones) a la sociedad Suzuki Motor Ibérica, por lo que tras la absorción quedará extinguida y disuelta sin liquidación.
Esta operación de fusión por absorción tiene como objeto la mejora de la gestión, mediante el aprovechamiento de las sinergias, la simplificación y la racionalización de la estructura jurídica y organizativa del Grupo Suzuki en España, lo que redundará en unos menores costes operativos.