En concreto los automóviles y camiones del resto de Europa que quieran utilizar la red de autopistas alemanas tendrán que abonar 100 € para adquirir una pegatina que les dé permiso de uso. Afortunadamente de momento esta tasa no será de aplicación para las motocicletas.
Por desgracia este nuevo impuesto de circulación no está gustando nada a los países vecinos de Alemania que en contraposición podrían establecer medidas similares generando una cadena de represalias que acabe afectando a toda Europa.
Aun así, Alemania sigue siendo el lugar perfecto para los viajes de alta velocidad (fuera de circuito) y sin el temor a ser sancionado con enormes multas o con la cárcel.
Salvo en determinadas zonas sometidas a obras de rehabilitación o al mal tiempo, la Autobahn es una verdadera " carretera de la libertad". Si el pago se pudiera fraccionar con subdivisiones semanales o mensuales de esta “autopista de peaje”, las cosas no serían tan dramáticas para los eventuales viajeros en automóvil. De hecho Hungría pide alrededor de € 15 a la semana por el mismo motivo, así que si quieres cruzar el país rumbo a Europa, ya sea occidental u oriental, tocará pagar.
El pago del impuesto de circulación alemán se podrá realizar en la “frontera” y en los clubes de automóviles extranjeros. Las multas por no llevar la pegatina que acredita el pago del impuesto serán muy onerosas. Por ejemplo, las multas de Austria por no pagar el peaje de 8.50 € es de 120 €, aún no se han declarado los importes en Alemania.