La sentencia anula en la práctica el permiso especial que la Consejería de Medio Ambiente le había dado al Club Turismoto para organizar allí la concentración desde 2009, por lo que la famosa concentración invernal de Pingüinos no podrá volverse a celebrar en el Pinar como venía ocurriendo en las últimas ediciones.
Según consta en la sentencia (no recurrible) del TSJCyL, la autorización de la concentración infringe la Ley de Montes de Castilla y León, las Directrices de Ordenación del Territorio de Valladolid y Entorno (DOTVAENT), el PGOU de Valladolid y el Plan del Pinar, ya que este bosque está catalogado como Área de Singular Valor Ecológico (ASVE) y Parque Metropolitano.
Es más, la sentencia pone en cuestión el informe previo a la edición del 2010, en el que el técnico municipal Jesús Ángel Ortega Valverde, justificaba la legalidad del evento en dicha ubicación. La concentración vulnera la situación de protección especial tanto de la Playa de Puente Duero como del Pinar de Antequera. Esta protección que data de 1997 implica que ambos espacios “están calificados como suelo rústico de protección especial en el cual esos instrumentos de planeamiento prohíben el uso de recreo extensivo y de ocio con vehículos motorizados”.
Ecologistas en Acción ha manifestado que la sentencia ratifica la imposibilidad legal de utilizar cualquier lugar del Pinar de Antequera para la realización de la concentración motorista “Pingüinos”, y lamenta que el Ayuntamiento de Valladolid y la Junta “se hayan valido una vez más de la lentitud de la Justicia”. Por todo ello, los ecologistas exigen a la Junta que ejecute sin dilación el aval de 45.000 euros requerido al Club Turismoto para la restauración del pinar.
El Club deberá llevar a cabo acciones como la retirada de las infraestructuras, demolición de las construcciones, acondicionamiento de caminos y senderos o la plantación de 8.000 nuevos pinos y su riego durante los próximos 5 años. Este sobrecoste económico podría afectar a la organización de futuras ediciones de Pingüinos.
