Según Brandt, el artífice de esta creación, “las motos japonesas de los años setenta no valen más de diez centavos, para realizar una creación verdaderamente interesante lo mejor es comenzar con una motocicleta británica”. Habitualmente, una vez adquirida una motocicleta británica clásica y cara, sus propietarios desean restaurarla para devolverla a su estado original, pero los de Federal Moto han querido desviarse de la norma y crear un modelo exclusivo.
Esta Norton Comando 1974 fue encontrada por casualidad en una granja de Rimbey, Alberta. No tuvo apenas uso durante la primera etapa de su vida, por lo que su mecánica estaba impecable. A partir de aquí todo fue sobre raíles, Federal quería mantener el alma de la moto, pero haciendo importantes cambios de diseño.
“Si sus diseñadores originales vieran en lo que la hemos transformado estarían deseando volver a conducirla”, afirma Brandt con una buena dosis de orgullo por el trabajo bien realizado.
Gran parte de su nueva estética proviene de los neumáticos elegidos de 19”, unos Coker Diamond Treads y de la eliminación de todas las piezas innecesarias, incluidos los guardabarros originales, el caballete central y los reposapiés raseros. Una reducción que no solo se notó en la línea sino también en la báscula, con 13 kilos menos de peso.
Los nuevos guardabarros son también de Triumph de los años 50, rescatados de un montón de chatarra, reformados y acabados en negro mate. En el apartado de frenos, Federal mantuvo el freno trasero original, y cambió el delantero por un conjunto de dos pistones Tokico. La horquilla es de una Katana 750. El tubo de escape proviene de una Norton Commando SS de 1971, pero el silencioso que le ha acoplado proviene de la empresa Modern Motorcycle Company de Australia.
El piloto e intermitentes con forma de bala mantienen la línea del conjunto. Por supuesto lo que no se ve también ha sido reformado. Hay un juego completo de cables nuevos y una batería de cuatro celdas Antigravity escondidos bajo el asiento. La instrumentación original ha desaparecido, reemplazada por una visión mini del velocímetro Smiths que se puede ver en muchas motos británicas de la época.
Todo ello se remató con un manillar BS A10/A65 Low, que mantiene a la perfección las raíces británicas de la moto y que lleva en sus extremos los puños de goma natural Tommaselli Natures de 1970, pedidos directamente a la fábrica italiana.
En resumen un modelo único, montado con una mezcla irrepetible de piezas de desguace y de nueva factura, que muestra una motocicleta tipo Scrambler con una línea que rezuma lujo y exclusividad por dondequiera que se la mire.