Sorprendentemente los propietarios de
vehículos con matrícula alemana también tendrán que acostumbrarse a pagar por
circular por las Autobahn. Aunque en su caso el importe abonado le será
descontado en el impuesto de matriculación correspondiente.
El nuevo impuesto a los extranjeros, viene
de una reivindicación de la zona sur de Baviera, donde los residentes tienen
que pagar peaje por utilizar las carreteras de los países limítrofes de Austria
y Suiza. Esta respuesta a modo de represalia contra los “extranjeros” proviene
del partido de Angela Merkel, Unión Demócrata Cristiana de Alemania (CDU).
Gracias a su posición geográfica y
afortunada orografía con amplias planicies, Alemania es un nodo de las
carreteras de Europa que tienen que utilizar numerosos transportistas y
ciudadanos para desplazarse a países como Francia, Luxemburgo, Holanda,
Bélgica, Dinamarca, Polonia, Suiza, Austria y República Checa, entre otros.
El instaurar un "impuesto de circulación" a los extranjeros
podría crear una cadena de represalias en los países vecinos que finalmente
lleven a la creación de un impuesto por circular por las carreteras de Europa.
Una medida que frenaría los logros alcanzado con la creación de la UE.
Los críticos con la medida (residentes
muchos en esos países limítrofes que ya cobran a los alemanes por usar sus
carreteras) llevan meses manifestándose en contra aduciendo que viola las leyes
de la Unión Europea a favor de la libre circulación entre los países miembros y
en contra de la discriminación.
Fuente: elEconomista