El año pasado más de un millón de conductores fueron detectados circulando con exceso de velocidad. El aumento de los viajes por carretera en los meses estivales incrementa el riesgo de padecer un accidente. Para mantener las buenas prácticas en la conducción, Tráfico ha puesto en marcha desde ayer hasta el próximo domingo 24 de agosto una campaña especial que intensificará la vigilancia y el control de velocidad.

Hay que recordar que las carreteras convencionales son las más peligrosas, las que mayor número de víctimas registra y en las que los límites de velocidad son menos respetados.

Como en campañas anteriores, se ha invitado a los ayuntamientos y a las comunidades que tienen transferidas las competencias de tráfico a sumarse a esta campaña, para transmitir el mensaje de que siempre se deben respetar los límites de velocidad establecidos, independientemente de la vía por la que se circule, con el fin de reducir la accidentalidad y la gravedad de los lesionados

LOS DATOS DE LA DGT

Según las estadísticas de Tráfico, cumplir con los límites legales evitaría una cuarta parte de los accidentes de tráfico. Eso supone que en el año pasado 366 personas fallecidas y 1.518 heridos graves podrían haberse evitado. De estas, 233 muertes y 958 heridos fueron en carreteras convencionales.

En un estudio de la DGT realizado sobre la velocidad libre en las carreteras españolas (aquella velocidad media a la que se llega cuando hay muy poco tráfico, nula presencia policial, poco desnivel, buen tiempo y tramos rectos) y se llegó a las siguientes conclusiones:

• Carreteras Convencionales: El 39% de los conductores superaba la velocidad límite establecida y un 13% lo hacía en más de 20 km/h. En las vías desdobladas, este porcentaje baja hasta el 6,5%.
• Autovías: El 10% de los conductores superaba en 10 km/h la velocidad límite de la vía.

Este estudio se ve refrendado a nivel europeo por el SARTRE 3 sobre actitudes y comportamientos sociales, en el que el 25% de los conductores reconoce superar los límites de velocidad en autopistas y autovías, y el 13% en carreteras convencionales.

PENAS y SANCIONES

Los conductores que incumplan los límites de velocidad establecidos estarán cometiendo una infracción grave o muy grave, sancionada con multa de 100 a 600 euros y la pérdida de entre 2 y 6 puntos, dependiendo del exceso de velocidad cometido.

En el caso de que el exceso de velocidad fuera superior en 60 km/h en vía urbana o en 80 km/h en vía interurbana a la permitida reglamentariamente, el Código Penal lo tipifica como delito y es castigado con la pena de prisión de tres a seis meses o a la de multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, a la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.

Fuente: Ministerio del Interior