Hay que remontarse a los años 20 del siglo pasado, durante la dictadura de Primo de Rivera, para ver el inicio de la construcción del llamado “Circuito Nacional de Firmes Especiales” en el que se trataba de dar respuesta al deteriorado estado de la red viaria asfaltándose algunos de los tramos de la antigua calzada romana. Sin embargo no fue hasta los años 50 y 60 cuando definitivamente se construyó esta carretera perimetral que atraviesa diez provincias de cuatro comunidades autónomas.

Siendo España el cuatro país más extenso de Europa, solo por detrás de Rusia, Ukrania y Francia, el conectar los pequeños núcleos de población mediante extensas vías de comunicación representó todo un desafío para los ingenieros de principios del S.XX.

El desarrollo turístico de algunas localidades y los movimientos migratorios del campo a la ciudad fueron claves para el desarrollo de una red que facilitara los traslados de miles de familias que durante el verano dejaban la industrializada Cataluña (la región más próxima a Europa) para volver a sus localidades de origen en el sur de la península.

Con este fin se creó la Nacional 340, o simplemente N-340. El método de numeración utilizado para nombrar nuestras carreteras tras la N de "nacional", se debe a tres componentes: el primer dígito indica el sector comprendido entre las carreteras N-III y N-IV; el segundo a la distancia que la separa de Madrid en kilómetros (más de 400 km); y el tercero “0” indica que es una carretera no radial (no toma Madrid como punto de partida) sino transversal.

La N-340 parte de la localidad de Puerto Real (Cádiz) en el cruce con la autopista A-4, por lo que el primer tramo se llama A-48 hasta alcanzar Vejer de la Frontera.  Desde aquí, y por más de 1248 km, se recorren las localidades de Conil, Marbella, El Ejido, Murcia, Elche, Alicante, Valencia, Castellón o Tarragona, hasta desembocar en la Avenida del Paral-lel en Barcelona.

Con tal longitud no es de extrañar que alguno de sus tramos presentan peligrosos puntos negros, como el comprendido entre los puntos kilométricos 678,6 y 698,5 (el más peligroso de España). Para evitar estos tramos, y la congestión de tráfico que con los años no ha parado de crecer, se creó la autopistas A7 o AP7 que trascurren paralelas al trazado. Esta última tendrá cuando esté finalizada una longitud de 1.330 kilómetros.

Fuente: Fronteras, ABC