Aunque la nomenclatura Smart Higway (carretera inteligente) puede resultar un tanto engañosa en este caso, pues la carretera no incorpora conexión inalámbrica con otros vehículos o con Internet. Aunque es sin duda inteligente, en el sentido de proporcionar una alta visibilidad en las peores condiciones climatológicas con un gasto energético casi nulo.
En lugar de utilizar pintura reflectante como es habitual en nuestras carreteras, recurren a un tipo d pintura fosforescente que recoge la energía lumínica del Sol durante el día para devolverla durante la noche. Puede lucir hasta 10 horas después de haberse puesto el Sol. De este modo se logra una mayor visibilidad sin recurrir a la electricidad.
El tramo de carretera instalado en Oss, servirá de experiencia piloto para comprobar su efectividad, mantenimiento y durabilidad en condiciones reales de tráfico. De funcionar, el siguiente paso será que las marcas viales se muestren a los conductores con mensajes que cambien en función de condiciones meteorológicas como la temperatura y el riesgo de deslizamiento.
También se plantea introducir iluminación interactiva de las carreteras que solo se enciende al paso de los vehículos para iluminar el tramo de carretera en frente de ellos y se van apagando a sus espaldas.
De funcionar la experiencia piloto, las líneas fosforescentes podrían extenderse a las carreteras de todo el mundo.