El nuevo compromiso alcanzado por 30 votos a favor, 1 en contra y 2 abstenciones, retrasa en dos años y media la fecha propuesta inicialmente (octubre 2015) por la Comisión para la entrada en vigor de forma obligatoria del sistema eCall.
El sistema eCall incorpora una tarjeta SIM al vehículo que le permite realizar llamadas automáticas al número de emergencias europeo 112 en caso de registrarse un accidente grave. Según los estudios preliminares, el ahorro de tiempo para los servicios de emergencias supondría que se puedan salvar hasta 2.500 vidas al año.
Con los datos recibidos a través de la llamada de emergencia se podrá localizar el siniestro y el número de personas involucradas, debido a los sistemas de identificación de cinturones abrochados. Esta información podría incrementar la velocidad con la que los servicios de emergencias intervienen en un 40% en las inmediaciones de las zonas urbanas y en un 50% en las zonas rurales.
El principal inconveniente que retrasaba el proyecto era la necesidad de reforzar las cláusulas de protección de datos para evitar que un determinado vehículo equipado con eCall pueda ser rastreado antes de que ocurra un accidente. Además en caso de que se produzca el accidente, el sistema eCall solo podrá facilitar datos básicos, como tipo de vehículo, de carburante, momento y lugar del accidente.
Además los datos reunidos por los centros de emergencia no podrán ser transferidos a terceros sin el consentimiento expreso del usuario, y el eCall deberá facilitar el borrado permanente de los datos reunidos.
Ahora solo quedan los últimos trámites, que son la aprobación independiente por los diferentes estados miembros de la UE, y finalmente por el pleno de la Eurocámara en marzo del 2015.