Se trataría de crear unas “TT Series” de carácter internacional que tendrían lugar en carreteras convencionales de diversos países del mundo, y que tendrían como fin de temporada a la tradicional competición TT Isla de Man.
Como parte del acuerdo, la Isla de Man concederá todos los aspectos comerciales de los eventos TT al promotor de los mismos, incluyendo los derechos de trasmisiones televisivas nacionales e internacionales, los patrocinios, licencias, los hospitality, venta de entradas, merchandising y ventas al por menor.
A cambio, el promotor elegido será responsable de gestionar las carreras Isla de Man TT y TT Classic, conjuntamente con el gobierno Isla de Man. El promotor también será responsable de contratar de forma independiente los distintos emplazamientos que albergarán los eventos "TT Series" en todo el mundo.
Con esta iniciativa el gobierno de la Isla de Man busca obtener un reconocimiento más internacional, creando una oferta más atractiva, con un incremento del turismo y del prestigio de la pequeña nación insular.
La nueva competición podría ser una oportunidad para atraer a jóvenes talentos. Nuevos pilotos que a su vez podrían conseguir la atención de los patrocinadores y de los equipos. En definitiva, se trata de crear una nueva competición como MotoGP o WSBK, pero con su propio (y peigroso) estilo.
Fuente