En su comparecencia ante la Comisión sobre Seguridad Vial y Movilidad Sostenible del Congreso de los Diputados, Seguí informó que el año pasado hubo controles preventivos masivos y que los test se extenderán este año a todos los conductores implicados en siniestros de tráfico.

Además señaló que la gran cifra de positivos en los test evidencian “un aumento del consumo problemático de esas sustancias, que estamos seguros que se refleja en la conducción”.

Seguí también presentó las cifras de siniestralidad del 2014, indicando que murieron 1.128 personas en las carreteras (con datos a 24 h del accidente), lo que se traduce en una década de descenso en la siniestralidad, en contraposición con Francia o Reino Unido en donde han experimentado un aumento del 5 y el 6%, respectivamente. Solo Eslovaquia, Letonia y Lituania pueden presumir de una reducción de la siniestralidad en la carretera de más de un 63% en 12 años (2001-2013).

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