Gas Gas no solo paró la producción de motocicletas, también la de respuestas y declaró una suspensión temporal del departamento de I+D. Todos ellos estaban pendientes del presidente, Yariv Gilat, que estaba negociando una línea de crédito de 24 millones de euros para poder continuar con las actividades. Hasta el momento la empresa de Salt (Gerona) se ha mantenido a flote solo gracias a la ayuda gubernamental. Aunque dicha ayuda no podrá mantenerse en el tiempo, Gilat confiaba en una renovación.

Si los rumores se confirman Gas Gas sería la tercera marca de modelos off-road de Europa que pasará a formar parte del grupo KTM, junto con las recientemente adquiridas Husaberg y Husqvarna.

Dos compañías reflotadas con acierto en un tiempo record, y eso a pesar de que la mayoría de las apuestas apuntaban a un cierto grado de canibalismo en las ventas de KTM por parte de las nuevas incorporaciones. Lo cierto es que Husky logró el año pasado superar todas sus marcas con un aumento de las ventas del 50% (2014) frente al 2012, último año completo en el que permaneció bajo el amparo de BMW.

Los esfuerzos de Gas Gas por superar la crisis de ventas tampoco han sido escasos en el último año. El último consistió en buscar una reducción de costes mediante la fabricación conjunta de modelos con la también española Ossa.

Si Gas Gas finalmente entra bajo el paraguas de KTM, se podría abrir un futuro despejado gracias a la inyección de liquidez y la integración en la amplia red de concesionarios de KTM. Además la posibilidad de compartir sinergias con tecnologías y motores de otros modelos del grupo sería muy alta, en marzo del 2014 Gas Gas anunció que compraba la tecnología de motores de la antigua Husqvarna.

En cualquier caso, todo lo que hay hasta el momento son rumores y habrá que esperar a algún tipo de confirmación oficial antes de respirar aliviados.

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