Ana Botella quiere despedirse de la Alcaldía de Madrid innovando. El Área de Movilidad, dependiente del concejal Diego Sanjuanbenito, ha lanzado las motomultas sin previo aviso. Se trata de cuatro motocicletas Piaggio adaptadas mediante una cámara situada en un mástil y una caja de registro, cuyo objetivo será barrer las calles de Madrid a la caza de los conductores mal aparcados, o que no hayan renovado el tique del SER.

Las motomultas se unen así a los cinco coches con dispositivos electrónicos en el techo rotulados con la leyenda “Aparcamiento Regulado Inteligente”. Las máquinas son capaces de detectar de forma automática la matrícula del coche, comprobar si tiene tarjeta de residente, si está al corriente de pago, si debe abonar el precio del parquímetro o si ha renovado el tique a tiempo.

Las cuentas del Ayuntamiento son claras: si los 700 controladores de zona SER son capaces de suscribir hasta 3.000 multas al día, con los nuevos vehículos 5 coches y 4 motos, la cifra se incrementará en unas 900. Esta cantidad hay que multiplicarla por los 90€ de importe de cada multa (45€ con el prontopago) y ya tenemos una estimación aproximada de lo que se recauda diariamente en Madrid con motivo de las multas de aparcamiento.

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