Garriga de 52 años, era una figura reconocida del motociclismo español a pesar de no contar con ningún título en su haber, tenía problemas con las drogas “van a por mí por la fama que tengo, un sambenito”, declaraba tras una nueva detención por tráfico de drogas.
Natural de Arrabassada (al norte de Barcelona), comenzó a correr en moto muy pronto. Con 12 años le robó la motocicleta a su hermano para recorrer la enrevesada carretera de Arrabassada. Siempre al borde de la ilegalidad, falsificó la firma de su padre para conseguir una licencia de competición.
Su carácter batallador le llevó a competir en todo tipo de carreras sin importar que fueran urbanas, de montaña o en circuitos. Se alzó con tres títulos de campeón de España (1984, 1986 y 1987) y tres triunfos en la subida a Montjuic (1984 y 1986) antes dar el salto al Mundial a los mandos de su propia JJ Cobas.
“Cuando me llamó Yamaha no me lo creía", decía sobre su debut en 1987 en un equipo oficial. En 1988 logró el subcampeonato de 250 cc tras una accidentada carrera final que le podría haber servido para auparse a la gloria. Tras su salto a la categoría de 500 cc, no logró ningún resultado reseñable y en 1993 se quedó sin sponsor.
A partir de entonces comenzó una amarga relación con la droga que le llevo poco a poco a la perdición. Perdió sus ahorros, su salud y finalmente su vida en accidente de tráfico.