Honda necesita un modelo bicilíndrico para competir de tú a tú con las Yamaha YZF-R3 y Kawasaki Ninja 300. Se trataría de una moto con una potencia en torno a los 35-40 CV, que contaría con una elaborada parte ciclo que no tiene nada que envidiar a sus hermanas CBR de mayor cilindrada.
El atractivo y aerodinámico carenado presenta unas novedosas ópticas y un acabado en negro mate con vinilos en el mismo color. El diseño del colín rememora el estilo Fireblade, y en la Super Sport se aprecia una horquilla invertida, guardabarros en fibra de carbono, frenos de disco alveolados y escape Akrapovic de titanio.
Todo un sueño de juventud ideal para los poseedores del carné A2 en Europa, y que en Asia se podría vender con menor cilindrada para dar forma a la CBR 250 RR 2016, e incluso se especula con un modelo sin restricciones de potencia que podría alcanzar los 60 CV y que iría destinado a las competiciones de iniciación.