“Ride like the wind without listening to it”

O lo que es lo mismo “pilota como el viento pero sin oírlo”. Y es que ese es uno de los principales problemas de los cascos, uno de los hándicap que más fatigan a los que conducen a diario durante horas (como las fuerzas policiales), y para aquellos amantes de los largos viajes en moto.

SENA aporta ahora la solución mediante la tecnología de control activo del ruido aerodinámico. Básicamente se trata de ondas sonoras que se producen en unos altavoces dentro del casco que cancelan exactamente las ondas del ruido ambiente. Este tipo de tecnología está disponible desde hace mucho tiempo en el mundo de la aviación y en las cabinas de helicóptero (especialmente en los cascos de los pilotos), pero nunca se había aplicado a los cascos de motocicleta.

La ventaja de los nuevos cascos de SENA es que se reduce la necesidad de utilizar los tapones para los oídos, y mantiene la posibilidad de escuchar el ruido ambiente (tráfico, sirenas, conversación, etc.). Con solo activar el módulo “INC”, el sistema analiza la información del ruido en torno al casco mediante cuatro micrófonos conectados en red que se ajustan en tiempo real para cancelar solo el sonido considerado “perjudicial” por no aportar información, lo que comúnmente denominamos “ruido”.

En el gráfico adjunto se puede comprobar como al viajar a una velocidad media de 65 MPH (104 km/h) tendremos en el interior del casco un ruido aerodinámico que supera los 100 decibelios. Con el sistema de cancelación automática del ruido se consigue rebajar la cifra en casi 40 decibelios.

El casco de SENA es una interesante pieza de tecnología de la que todavía se conocen poco detalles, como la fecha de comercialización o el precio. Los interesados pueden seguir las novedades y realizar los pedidos en la propia web de la compañía (SENA tiene distribuidores en Europa y también se pueden realizar pedidos directamente por Internet).