Y aquí es donde viene la pega, porque muchos modelos con motores deportivos podrían estar en el límite para cumplirla. En Ducati lo hemos visto con un comedido aumento de cilindrada en la 959 Panigale. Un modelo que podríamos calificar como “víctima” de los requisitos de la Euro4.
Pero en los modelos en los que la cilindrada es ya de por sí elevada (1.299 CC), seguir incrementándola no resulta una opción viable. Ahí es donde entra en juego la opción de la sobrealimentación, una posibilidad que, por otra parte, ya están poniendo en práctica los fabricantes japoneses (léase Kawasaki H2, Suzuki Recursion…).
Un periodista del portal Moto-Station entrevistó a Stefano Strappazzon sobre la posibilidad de ver en un futuro próximo una Ducati Turbo. Una idea ante la que solo mostró ambigüedad, signo de que en Brogo Panigale no se cierra la puerta a nada.
Los motores Panigale no pueden seguir creciendo como comentó el gerente del proyecto XDiavel, el señor Tarabusi. Por tanto a los ingenieros de Ducati solo les queda dos opciones: cambiar la arquitectura del motor aumentado el número de cilindros hasta el V4, o sumarse a la tendencia de sobrealimentación (con turbo o con compresor).
El motor de MotoGP ya proporciona una buena base para el desarrollo del V4 de carretera, pero por diversos motivos, Ducati cuenta ahora con el apoyo de AUDI y de su tecnología de motores turbo. Quizá esta alianza se materialice ahora en una versión del viejo continente, en una Ducati anti-Kawasaki H2.
Fuente: Moto-Station, Autoevolution