Los radares comúnmente conocidos como “foto rojo”, multaban con 200 € y 4 puntos de carnet a los conductores que sobrepasaban el semáforo con la luz en rojo. Gracias a estas multas, las arcas municipales de San Sebastián habrían ingresado más de 600.000 € entre 2012 y 2014.
A pesar de que el Ayuntamiento insiste en que no se trata de una medida recaudatoria, los radares fueron retirados hace un año por no cumplir con los requisitos de homologación. Ahora el Ayuntamiento busca alternativas para lograr los mismos objetivos.
Otros ayuntamientos como los de Madrid o Bilbao estiman que la puesta en funcionamiento de este tipo de radares ha reducido en un 50 por ciento la siniestralidad en las ciudades. Solo en Madrid existen 26 de estos dispositivos que seguirán en funcionamiento mientras no exista una orden judicial que los retire.
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