En ambos modelos se ha detectado cierto riesgo de lesiones como consecuencia de un accidente, debido a que existe el riesgo de que los engranajes de la transmisión de la segunda velocidad, tanto del eje principal como del secundario, puedan romperse o funcionar incorrectamente debido al uso extremo y al alto esfuerzo sufrido en la parte inferior del diente.
En consecuencia, los piñones de la tercera y cuarta velocidad pueden deformarse por el estrés excesivo causado por un uso severo y debido también a la resistencia inadecuada del material. En el peor de los casos, los piñones pueden llegar a romperse. En situaciones muy severas de reducción a segunda velocidad en circuitos, con asfalto con gran agarre y neumáticos tipo slic (competición) también de gran agarre, en reducciones de marcha muy bruscas o mal realizadas, puede llegar romperse el piñón de cambio de segunda velocidad por el stress generado, con el consiguiente peligro. El stress puede afectar otros piñones del cambio.
En similar alerta lanzada en EE UU se han visto afectadas todas las unidades importadas, y según la información técnica enviada a los concesionarios la labores de reparación del la caja de cambios y el nuevo kit de trasmisión necesitan 15,8 horas de taller y costarán unos 2.000 € por moto. Una cantidad de la que se hace cargo la garantía de Yamaha.
Ref.: RAS_2015_156_RAM