Entre las novedades para el próximo año destaca el pago a la sanidad pública de los gastos médicos que necesite el lesionado por accidente de tráfico de por vida. Hasta el momento las aseguradoras solo se hacían cargo de los tratamientos a las víctimas de un accidentes hasta el día de su curación, sin embargo el gasto de las dolencias o tratamientos derivados del accidente `a posteriori´, como infecciones o intervenciones quirúrgicas, los suplía el estado.
En el nuevo baremo de indemnizaciones aprobado el pasado 9 de septiembre en el Senado, ha trabajado el Gobierno durante los cuatro últimos años, junto con un nutrido panel de expertos de diversos ámbitos (aseguradoras, asociaciones de víctimas y juristas).
Ayudas de por vida
El nuevo documento obliga a las aseguradoras a mejorar la calidad de vida de los grandes lesionados, mediante el pago de prótesis, la rehabilitación o las ayudas técnicas a las víctimas durante toda su vida.
Las indemnizaciones de por vida que ahora tiene un máximo de 838.000 euros por lesionado pasarán hasta un tope de 1.472.000 € para los casos más graves. Unos importes que se podrán solicitar como capital (todo de una vez), como renta vitalicia (sueldo mensual), o mixto (parte se ingresa y parte se recibe como sueldo).
Un gasto que se considera “asumible” tras la bajada de las cifras de víctimas, el baremo actual aprobado en 1995 se realizó sobre un balance de 5.000 muertes y miles de lesionados al año, mientras que el de 2016 lo hará sobre 1.000 fallecidos. Esto implica que el nuevo baremo no debería suponer una subida del precio de los seguros.
Las ayudas técnicas incluyen adecuar la vivienda al lesionado por un valor de hasta 150.000 €, además de paliar el incremento de costes de movilidad que supone el uso de taxis, grúas, silla de ruedas, domótica, etc.
Además, en las indemnizaciones se tendrá en cuenta la realidad social, reconociéndose las parejas de hecho, del mismo o distinto sexo, a partir de un año de convivencia o menos tiempo si la pareja está registrada como tal. Los hijos se considerarán todos al mismo nivel independientemente de si son de la pareja actual o de uniones anteriores, y por primera vez se incluirá a los ascendentes (tercer grupo), a los hermanos de las víctimas (cuarto grupo), y a otros familiares que convivan con el fallecido durante al menos 5 años.
También se reconoce el valor económico del trabajador doméstico con un salario equivalente al salario mínimo interprofesional, o un salario mínimo y medio si hay menores a cargo de la víctima.
En las indemnizaciones por hospitalización no solo se tendrán en cuenta los días de ingreso, como hasta ahora, sino también el número de intervenciones quirúrgicas, estableciéndose un plus de 400-1.600 € por cada intervención.
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