Solo en las primeras 24 horas de funcionamiento el radar-STOP de Yerres, en el norte de Francia, ha detectado a 500 conductores que incumplieron con la obligatoria detención ante la señal de STOP. Una infracción por la que ahora tendrán que abonar 135 euros de multa y por la que perderán dos puntos del permiso de conducir.
El dispositivo instalado por primera vez en la ciudad francesa de Yerres de 29.000 habitantes, graba en imágenes a los vehículos que no realizan la detención obligatoria frente a una señal de STOP. El radar lee la matrícula del vehículo infractor e informa a la policía local, para que lo localice y sancione.
El radar, no solo es capaz de detectar si un conductor a cometido una infracción, sino también si la va a cometer, pues según la velocidad del vehículo, estima la posibilidad de que se detenga ante un paso de peatones o ante una señal de STOP.
A este nuevo tipo de radar se suma los que está implantando la DGT en España para vigilar el uso del cinturón y el móvil mientras se conduce.
Fuente: DGT