Este fin de semana, con ocasión del encuentro anual de la Asociación Española de Aniridia (AEA), los voluntarios de la zona centro del VAS (Voluntariado y Acciones Solidarias) y monitores de la Escuela Nacional de Conducción de Motocicletas (ENCM) de la AMM, han organizado una actividad mediante la que decenas de afectados por Aniridia han tenido la oportunidad de conducir una motocicleta por primera vez en su vida.
La Aniridia es una enfermedad rara (un caso cada 80.000 nacimientos) que ocasiona la ausencia de iris en los ojos y una serie de patologías colaterales que provocan que el afectado tenga un resto visual muy reducido y en ocasiones pueda llegar prácticamente a la ceguera.
Lógicamente los afectados por Aniridia no pueden obtener el permiso de conducir, sin embargo, esto no les resta un ápice de fuerza y de ilusión por la vida y este fin de semana han demostrado que “querer es poder”.
La presidenta de la AEA, Yolanda Asenjo, siempre ha tenido la ilusión de montar en moto hasta el punto de que se puede considerar motera de nacimiento. Gracias a su ilusión y a los voluntarios y monitores de la Escuela AMM, hemos organizado la segunda actividad de colaboración entre ambas asociaciones.
En esta ocasión hemos rizado el rizo, pues no nos hemos limitado a dar una vuelta en moto, sino que además, hemos hecho posible que los chavales y no tan chavales de la AEA, puedan conducir una motocicleta y sientan el placer y la sensación de libertad de ser motero.
La actividad ha sido un éxito rotundo, dilatándose casi una hora más de lo previsto y con la mayoría de los participantes repitiendo experiencia.
Desde estas líneas queremos agradecer a Yolanda y a todos los asociados de la AEA su confianza en la Asociación Mutua Motera para organizar tan entrañable evento, así como especialmente por las vivencias y enseñanzas que nos han transmitido.
Igualmente nuestro agradecimiento a los voluntarios y monitores de la AMM por su trabajo, su entrega y su pasión por los demás y por el proyecto.
Asociación Mutua Motera