De las 1.688 personas fallecidas en accidente de tráfico en 2014, 957 lo fueron por accidente en carretera convencional. De este modo se pretende llamar la atención de los conductores sobre los peligros que entrañan este tipo de carreteras, a la vez que se incide en la necesidad de adoptar un comportamiento correcto y seguro al volante.

Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil velarán especialmente porque se cumplan los límites de velocidad establecidos, porque los adelantamientos se producen de la forma correcta y porque se conduzca sin haber ingerido alcohol y/o drogas.

Además se vigilará el uso del casco y de los sistemas de retención, la ITV, la documentación del vehículo o que no se utiliza el móvil mientras se conduce.

La vigilancia de carreteras se complementará desde el aire con el uso de los helicópteros Pegasus.

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